La experiencia docente entre saberes prácticos y saberes teóricos

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Anne-Marie Chartier

Resumen

Hoy en día, dos modelos compiten para pensar la formación profesional de los profesores. Para el primero: es necesaria una buena difusión de los saberes de referencia para orientar las elecciones didácticas y pedagógicas (contenidos académicos pero también otras disciplinas científicas como la psicología del aprendizaje, la sociología de la escuela, etc.). Para el segundo, es en la acción y a través de ella como se avanza, lo que puede mejorarse mediante la elucidación reflexiva posterior. Buscamos la pertinencia de estos dos modelos analizando la práctica profesional de una maestra sobre su pedagogía de la escritura en la Sección Grande: sus elecciones estratégicas (progresión anual, distribución de los talleres), sus tácticas de interacción con los niños y sus fuentes de información (formación inicial y continua, lecturas personales, intercambios profesionales, etc.). En este caso concreto, podemos ver que una acción pedagógica coherente puede basarse en fuentes teóricas heterogéneas, que el practicante no ha tenido necesariamente en cuenta, aunque se haya beneficiado de ellas para su acción. Por otra parte, las actividades se eligen, se prueban, se perpetúan o se abandonan según criterios prácticos, y su elucidación a posteriori no conduce necesariamente a su cuestionamiento o mejora.